viernes, 9 de febrero de 2018

Corazoncitos por el cáncer



Tenía este post rondando en la cabeza, e incluso ya había escrito una versión de él, pero dudaba de si publicarlo o no. Dudaba porque puede malinterpretarse, ya que es un tema que hay que tratar con delicadeza, para que no quede la cosa como una rabieta infantil.

Porque ni infantil ni rabieta, eso que quede claro. Cada día se diagnostican más casos de cáncer, pero también aumenta el porcentaje de curación (afortunadamente), y cada caso es un mundo. Lo que nos hace iguales es el sufrimiento, por desgracia todos los enfermos de cáncer sufrimos más o menos las mismas consecuencias.

El caso es que se habla más de unos que de otros. Desde luego yo tuve la sensación de que, en la lotería que es el cáncer, me había tocado el patito más feo. Cada vez que me encuentro a alguien y le cuento que he tenido cáncer me mira el pecho. Es una reacción subconsciente, a veces no dura más de un segundo, pero los ojos van hacia mi busto. Y no, no suelo llevar escotes muy pronunciados, ni tengo una talla que llame la atención. Es que dan por supuesto que el que he tenido ha sido de mama. Me he visto obligada a decir las cosas del tirón: 
holaquetalhepasadouncáncerdecuellodeúteroperoyaestoybiengracias. Entonces ya no me miran el pecho, me miran a mi directamente con cara de no haber entendido nada…


La idea del post original me surgió porque había estado recibiendo esa semana varios mensajes, tanto por WhatsApp como por Facebook, en el que alguna mujer me pedía que pusiera un corazón en mi estado, sin explicaciones, para visibilizar el cáncer de mama. Por sistema suelo ignorar las cadenas, incluso las de este tipo, que se suponen que son solidarias para visibilizar una enfermedad que es un incordio. No contesto, no hago alegato, pero me da mucho igual. Porque no creo que poner un corazón en mi estado de Facebook haga mucho, y menos si además no tengo que decir nada, para que los hombres se queden pensando por qué narices pongo un corazón ahí. Porque aquí hay un dato importante: estas cadenas nos las mandamos exclusivamente entre las mujeres.

Pero coincidió que lo mandaron a uno de los grupos de WhatsApp a los que pertenezco y una mujer contestó. Pidió disculpas, porque tenía un mal día, pero que ella no iba a poner un corazón por el cáncer de mama porque estaba un poco harta de que se hablara de ese tipo de cáncer como si fuera el único que sufrimos las mujeres. Que ella estaba pasando por otro tipo de cáncer y que no se hablaba de él.

La verdad, es que manifestó, quizá de forma algo más rugosa, lo que a mi en algún momento se me había pasado por la cabeza. Pero ya digo que no iba a hablar del tema, hasta ayer. Me contactó por Twitter una mujer y me agradeció que hubiera contado mi experiencia en el blog (aún estoy hinchada de orgullo, qué os voy a decir). Me dijo que había hecho búsqueda en internet sobre el tema cáncer de cervix y tan solo encontró mi blog. De cáncer de mama tienes millones de entradas y muchos más testimonios, pero del de cuello de útero, no (que información hay, pero médica). Lo que me hace pensar en que, al final, las cosas me pasan para que las cuente… (A ver cuando puedo contar que me ha tocado la lotería…)

Y no es que quiera ponerme a comparar, ni a patalear, ni a señalar que tu cáncer es mejor que el mío… No, por favor… Pero sí es verdad que se ha abanderado, teñido de rosa, que es el color que nos han dicho que es el que representa a las mujeres (a mi particularmente el rosa no me representa nada) un cáncer que en realidad, también sufren los hombres.

¡Sorpresa! Sí, el cáncer de mama también se da en cualquier persona con mamas. El porcentaje en el que se da depende del tamaño: cuantas más células, más posibilidades. ¿Adivináis qué cáncer no sufre una persona de cromosoma XY? ¡El de cervix! Y sé que igual muchas personas ya lo saben, pero no es una generalidad. Se está quedando en el imaginario colectivo que el cáncer de mama solo lo sufren mujeres, y por eso al final parece que es el único tipo de cáncer que tenemos. Sin embargo no asociamos al hombre como que el único caso de cáncer que puede sufrir es el de próstata.

Y a ver, que tampoco quiero hacer un concurso de popularidad. Pero quiero reivindicar que el cáncer de cérvix es más común de lo que imaginamos, y que las mujeres, como cualquier persona en el mundo, enfermamos de otros tipos de cáncer también. No me molesta que se de visibilidad al cáncer de mama, pero como realmente se consigue apoyo para atajar el cáncer es presionando al gobierno para que destine dinero a investigación. Porque solo con la investigación se puede vencer esta enfermedad.

Que investiguen e implementen la detección de cáncer por análisis de sangre.

Que investiguen e implementen la quimioterapia que detecta a las células cancerosas y solo las ataca a ellas. Esto es muy importante para los casos en que no se ha podido detectar en el análisis de sangre, para mejorar la calidad de vida de la persona enferma.

Que investiguen e implementen, pero eso no se consigue con corazoncitos. Se consigue con dinero.

Podemos donar, que está bien. Precisamente por eso he destinado los beneficios de mi libro a la AECC. Pero no nos olvidemos que la mayor parte del dinero para investigación lo debe aportar el Estado. Y ahí solo podemos decidir con nuestro voto. Hay que pensar en lo que han hecho los que están y los que estuvieron en el poder acerca de este tema y en base a eso, y a su proyecto político, decidir.Pero decidir a conciencia, tomándonos nuestro tiempo para valorar. Porque nos afecta en mayor medida de lo que creemos.

Y luego, si nos apetece, podemos poner corazoncitos. Por qué no.

Pero hemos de recordar que a las que hemos pasado por otro tipo de cáncer también nos gusta que se nos recuerde. Poned un corazoncito también por el cáncer de cérvix. Y otro por el de ovarios. Y otro por el de colon, el de próstata… ¡Corazones por doquier!




Si te gusta lo que cuento no olvides suscribirte a la newsletter para no perderte nada. Sin spam, prometido. Pincha aquí

¡Y me puedes seguir en RRSS! 

Twitter y Facebook 




2 comentarios:

  1. Plas, plas, plas... Y estoy de pie aplaudiéndote. No lo has podido decir mejor. ¿Puedo compartir tu entrada?
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  2. ¡Claro que la puedes compartir! Muchas gracias!

    ResponderEliminar

Te invito a comentar, pero siempre desde el RESPETO. Me guardo el derecho a borrar cualquier comentario que considere que falta al respeto de cualquier manera. ¡GRACIAS!